El joven de 23 años logró vulnerar la seguridad del partido más importante de la temporada en el fútbol europeo. La final de la Champions vio cómo un italiano entró como Pedro por su casa a San Ciro y se tomó fotos con Florentino Pérez, Sergio Ramos y Lucas Vásquez; hasta alzó la ‘orejona’ y se la pasó a James… ¡Sin ni siquiera tener una boleta!
Tres días después de su hazaña, Galasso le contó los detalles al diario As, en donde lo hace ver tan sencillo que aterra. Para entrar al estadio compró una cinta similar a las acreditaciones de prensa y se la colgó en su cuello, dejando dentro de su chaqueta la parte plastificada que debería llevar su identificación.
“Le dije al steward: ‘¿Pero cómo me pides la entrada?’. Y se disculpó”. Fácil. Se grabó haciendo esa maniobra y es tal cual a como la narra.
Luego, ya en las graderías, se las ingenió para tomarse selfies con cuanta figura encontró: Zanetti, Maldini, Shevchenko…
“Corté un escudo del Madrid de una camiseta, y lo pegué a mi chaqueta. Lo metía y lo sacaba dependiendo de la situación. Para levantar la copa, lo saqué”, pues se hizo pasar por jefe de seguridad del Madrid.
“Le dije yo a lo stewards dónde se tenían que poner. Me hicieron caso. Y luego me fui con los jugadores”.
En el momento de alzar el trofeo se ubicó al lado de Raphael Varane, quien le pasó el trofeo y él se lo dio a James: “Yo le di la Undécima a James”.
Así es: un chico que nada tiene que ver con el Real Madrid logró alzar la Champions de la manera más sencilla que hay, algo casi infantil. Pero no es la primera vez que lo hace.
Recuerda que también se coló en la final de la Copa de Italia de 2012, que le ganó el Napoli a Juventus y también hizo parte de la alzada del trofeo.
Su historia ha tenido tanto eco en el mudo, que el programa El chiringuito de España reconstruyó su gesta en esta crónica:
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