Los lusos arrancaron ganando por medio de Djo,  Bolinha empató para los asiáticos, pero Joao Matos puso el dos -1 con el que se fueron al segundo tiempo.

Portugal anotó el tercero por medio de su figura Ricardinho, y parecía que de esa forma sentenciaban el encuentro. Sin embargo, Azerbayán no bajó los brazos y arriesgó al adoptar el esquema de arquero jugador.

La medida dio sus frutos cuando Eduardo puso el 3-2 cuando aún faltaban cinco minutos para terminar el encuentro.

Ese tiempo es una eternidad en el fútsal y lo fue más para Portugal porque Azerbayán lo puso contra las cuerdas. Pero el empate nunca llegó, en parte al buen trabajo del arquero Bébé.

De esta forma, Portugal se sumó a los clasificados a semifinales y en esa fase se verá las caras con Argentina, el próximo miércoles.

Por su parte, Rusia y la sorprendente selección de Irán definirán al otro finalista.