Fue una sanción justa tras el agarrón dentro del área Juan David Valencia a Moreira, tanto que apenas un par de jugadores del Independiente Medellín protestaron la decisión del juez central.

Frente al punto blanco del penal se paró Lucas Alario, quien decidió patear al centro. El arquero David González, que se lanzó hacia la izquierda, logró despejar el balón con los pies, pero de nuevo el jugador de River estaba allí para asistir a Ignacio Fernández, que envió la pelota al fondo de la red.

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Sin embargo, el árbitro decretó mano de Alario, a quien la pelota le pegó en el brazo, para anular así la jugada de gol de River Plate que buscaba en este partido ser el líder de su grupo con miras a los octavos de final de Copa Libertadores.

Medellín, por su parte, tenía como meta del compromiso quedarse con el segundo cupo a la próxima ronda. No obstante, el triunfo parcial de Emelec sobre Melgar dejan al ‘poderoso’ en el tercer puesto y lo envían a la Copa Sudamericana.

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