El Cinco Cero recuerda la gresca que se formó cuando Ernesto Díaz convirtió un gol para Colombia sobre el final del primer tiempo y le dijo algo que molestó al arquero Éver Almeida.

“La policía entró al campo de juego, pero a darle bolillo a Willington Ortiz, Alfonso Cañón, ‘Mosca’ Caicedo, Pedro Zape, ‘Toto’ Rubio y los demás. Hasta el propio técnico. ‘Efraín ‘Caimán’ Sánchez, terminó golpeado”, añade el portal de anécdotas y estadísticas.

El árbitro suspendió el partido y la Conmebol le dio los puntos a Colombia para clasificar a la semifinal de la Copa América, que por entonces no tenía una sede fija.

Quince años más tarde, Colombia llegó ilusionada a Paraguay luego de una victoria 2-0 sobre Ecuador en el debut del camino hacia el Mundial de Italia 90, pero empezando por el arbitraje de Hernán Silva, la Tricolor debió resignarse a no lograr un buen resultado.

“Ese día se unieron dos de los discursos que los colombianos y los medios tenían desde décadas atrás: el terror que era jugar en Defensores del Chaco y lo malos que son los árbitros chilenos”, recuerda Gol Caracol.

El portal especializado en fútbol recuerda que Silva expulsó a Leonel Álvarez “por defenderse de una gresión” y luego ignoró un penal sobre Arnoldo Iguarán, que convirtió el gol del empate parcial 1-1, a falta de 4 minutos para terminar el encuentro.

Pero en una salida de René Higuita para rechazar un balón sobre el tiempo de descuento, chocó con un paraguayo y la acción terminó sancionada como pena máxima, lo que causó la ira de los jugadores colombianos:

Antes de que José Luis Chilavert convirtiera el tanto de la victoria ‘guaraní’ (el primero de toda su carrera), se desató la trifulca con los ‘cafeteros’ que tardó unos 10 minutos, y que incluyó el ingreso de la policía al campo de juego. Menciona Alejandro Pino que el arquero suplente de Colombia, Eduardo Niño, terminó recibiendo una golpiza a ‘bolillazos’, que iba dirigida inicialmente a Higuita.

Pero el capítulo de las ‘grescas’ entre paraguayos y colombianos en Asunción no terminó allí. El duelo por las eliminatorias hacia Francia 98 transcurría normal hasta que Faustino Asprilla tropezó en el área paraguaya con un defensor ‘guaraní’, a lo que el arquero Chilavert procedió a reclamar.

“El me escupió y yo reaccioné y le pegué, pero nadie entendía qué pasó porque la jugada estaba del otro lado de la cancha. Por suerte el árbitro entendió qué ocurrió y pitó penal, me expulsó a mí y luego lo expulsó a él”, recordó el ‘Tino’ hace poco el episodio en la emisora paraguaya ABC Cardinal.

Tras las rojas a Asprilla y Chilavert, este último se dirigió al banco de suplentes colombiano y le dio un puñetazo directo en la cara al delantero. En defensa de este apareció Víctor Hugo Aristizábal para darle una patada voladora por la espalda al guardameta y armarse una nueva batalla campal que de nuevo involucró a la policía.

También fue protagonista de la gresca el ‘Pibe’ Valderrama, a quien el arquero Faryd Mondragón le fue muy difícil detener y terminaron encarados entre los 2.

La Fifa terminó suspendiendo por varias fechas a Chilavert, Aristizábal y Asprilla; Mauricio Serna anotó el gol de penal que significaba el empate parcial 1-1, pero Paraguay volvió a anotar y se llevó la victoria en un momento difícil en resultados para Colombia.

LO ÚLTIMO