Es la primera vez que los asiáticos, constantes animadores en su región, están entre los cuatro mejores del torneo.

Irán arrancó mejor, a partir de la mayor posesión del balón, controló el ritmo de juego y mantuvo a Paraguay lejos de arco.

Sin embargo, los suramericanos se fueron primero arriba en el marcador. Irán no se desesperó, y alcanzó el empate de jugada preparada, que concretó Ahmad Esmaeilpour con un imponente derechazo.

Pero en el cierre del primer tiempo, los guaranís  concretaron un contraataque y terminaron ganado 2-1.

En la segunda mitad, los asiáticos salieron decididos al empate y lo lograron. Paraguay, que no se mostró nunca cómodo en el partido, perdió dos jugadores, uno por lesión y otro por expulsión.

Irán no desaprovechó estas falencias y marcaron el tercer gol, y pero los sudamericanos arriesgaron y faltando tres minutos de acabar el partido lograron la paridad.

El partido debió irse a los tiempos extras, donde nuevamente Irán se mostró superior, aunque el gol llegó a 22 segundos de terminar el juego.

De esta forma, Irán enfrentará por un lugar en la final al ganador de Rusia y España.

 

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