El expresidente de la Confederación Suramericana de Fútbol está implicado en el escándalo de sobornos millonarios conocido como ‘Fifagate’, por lo que actualmente permanece bajo prisión domiciliaria en Asunción, y la justicia de los Estados Unidos lo espera.

El fallo judicial coincide con la presentación de pruebas y declaraciones incriminatorias emitidas esta semana por un exempresario argentino de medios durante el juicio oral que se inició en Nueva York contra exjerarcas del fútbol sudamericano y empresarios.

Ricardo Preda, el defensor de Leoz en el pleito por la extradición, dijo a la AFP que apelará la resolución ante el tribunal de segunda instancia.

Léoz es uno de los 42 exdirigentes del fútbol de las Américas y empresarios deportivos acusados de corrupción por el gobierno estadounidense tras el llamado ‘Fifagate’, que estalló en 2015. Tres de ellos, que se declararon inocentes de los cargos, son los que están siendo juzgados en Nueva York.

En el juicio, el argentino Alejandro Burzaco, extitular de Torneos y Competencias, compareció como testigo protegido de las autoridades estadounidenses y denunció que desde 2004 pagó y se comprometió a pagar sobornos por unos 160 millones de dólares a cerca de 30 exjerarcas del fútbol, incluido Léoz, para la concesión de los derechos de televisación de torneos internacionales de fútbol.

Por contratos con T&T de la Copa Libertadores, la Copa Sudamericana y la Recopa Sudamericana, como entonces presidente de la Conmebol “Nicolás Léoz recibía 600.000 dólares por año y para fines de la década del 2000 subió a un millón de dólares anuales (hasta su renuncia en 2013)”, dijo Burzaco en la corte.

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El empresario también dijo que Léoz “confundía” a propósito sus finanzas personales con las de la Conmebol y que la Fifa le depositó en su cuenta personal cinco millones de dólares que eran para la Confederación.

Revuelo en Argentina

Burzaco dijo asimismo que Léoz, al igual que Julio Grondona y Ricardo Teixeira, exjefes del fútbol de Argentina y Brasil, respectivamente, votó por Catar 2022 a cambio de sobornos.

Las denuncias de Burzaco generaron un gran revuelo sobre todo en Argentina.

Sobre el fallecido Grondona, también exvicepresidente primero de la Fifa, denunció que su empresa y sus socios Televisa de México y TV Globo de Brasil le pagaron al argentino 15 millones de dólares en sobornos por los derechos de televisación, internet y radio de los Mundiales 2026 y 2030.

Ambas empresas negaron las acusaciones.

El hijo del exdirigente argentino y exvicepresidente primero de la Fifa, dijo este jueves que Burzaco “mintió”.

“Burzaco mintió. Y fue muy grave. Lo que dijo de los derechos del 2026 y 2030 es una locura, si papá había muerto. Es una locura porque los derechos se dieron hasta el 2018 y el 2022”, afirmó Grondona hijo.

Luego de la comparecencia de Burzaco, el empresario argentino Jorge Dehlon, implicado en las acusaciones, se suicidó el martes arrojándose en las vías del ferrocarril en un suburbio de Buenos Aires.

Parkinson e hipertensión

“El delito de soborno privado no es un delito estipulado en el Código Penal de Paraguay”, sostuvo el abogado de Léoz, cuya estrategia sería postergar así por tiempo indefinido la extradición del exdirigente “por razones de salud”.

Léoz padece de Parkinson y de hipertensión entre otros males de la edad.

“Si hubo un soborno entre particulares, no es un delito en Paraguay. Si no es un hecho punible en Paraguay, no se puede extraditar”, puntualizó el abogado.

“Además, el doctor Léoz tiene problemas de salud desde hace 5 años. Hoy tiene 89 años y tiene asistencia médica las 24 horas. No viaja en avión desde hace cuatro años por razones de salud”, argumentó Preda.

Propietario del exclusivo Sanatorio Migone de Asunción, Léoz se internó en el nosocomio poco después de las detenciones masivas de dirigentes de la Fifa en Zúrich en mayo de 2015.

Los médicos reportaron entonces un cuadro de hipertensión.

Sobre Léoz pesan los delitos de “asociación delictuosa de crimen organizado, asociación delictuosa de fraude electrónico, fraude electrónico, asociación para el lavado de dinero y lavado de dinero” entre los años 2010 y 2013.

130.000 dólares para escuelas

En declaraciones a la AFP en 2015, Léoz negó haber recibido cifras siderales por negociados en los derechos de televisación de los partidos organizados por la Conmebol.

Solo admitió haber aceptado de la ISL (International Sport and Leisure), la empresa suiza de patrocinio deportivo que estuvo muy vinculada a la Fifa en los noventa, unos 130.000 dólares “en carácter de donación” en el año 2000 para “construir escuelas para indígenas en distintos puntos del país (de Paraguay)”, donde tiene su sede permanente la Conmebol.

Léoz, con 50 años de dirigencia deportiva y 27 al frente de la Conmebol se retiró en 2013 de la entidad sudamericana y de la Fifa tras alegar problemas de salud.

AFP