La afirmación fue hecha por la firma británica Carspring luego estudiar a 255 integrantes de las ligas de Inglaterra, Alemania y España, según lo desatacó la página Expansion.com.

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Además, determinó que quienes se desempeñan de mitad de cancha para arriba prefieren los autos deportivos, mientras que los del bloque defensivo optan por los utilitarios

Los resultados aparecieron luego analizar los sueldos, fuera de primas, de todos los futbolista y dividirlos por el número de encuentros disputados.

A continuación, el listado de 20 casos representativos:

Cristiano Ronaldo (POR, Real Madrid): Bugatti Veyron Grand Sport Vitesse – 5 horas y 15 minutos
Lionel Messi (ARG, Barcelona): Ferrari F430 Spider: 31 minutos
Wayne Rooney (ING, Everton/Man. United): Aston Martin Vanquish S. – 50 minutos
Franck Ribery (FRA, Bayern Múnich): Lamborghini Gallardo – 23 minutos
Karim Benzema (FRA, Real Madrid): Bugatti Veyron – 7 partidos
Gareth Bale (GAL, Real Madrid): Mercedes SLS Roadster AMG GT – 37 minutos
Sergio Ramos (ESP, Real Madrid): Mercedes AMG GT S – 57 minutos
Paul Pogba (FRA, Man. United): Maserati Gran Turismo – 24 minutos
Fernando Torres (ESP, Atl. Madrid): Aston Martin D89 – 2 horas y 19 minutos
Jesús Navas (ESP, Sevilla y Man. City): Nissan Micra – 11 minutos
Fernando Llorente (ESP, Tottenham): Fiat Punto – 13 minutos
Pedro Rodríguez (ESP, Chelsea): Peugeot 208 GTI – 23 minutos
Guanluigi Buffon (ITA, Juventus): Fiat 500 – 19 minutos
N’Golo Kante (FRA, Chelsea) Mini Cooper SD – 12 minutos
Joey Barton (ING, Burnley): Toyota Prius – 28 minutos
Phil Jagielka (ING, Everton): Vauxhall/Opel – 46 minutos
Harry Kane (ING, Tottenham): Range Rover Sport – 53 minutos
David de Gea (ESP, Man. United): Range Rover Sport – 32 minutos
Tom Heaton (ING, Burnley): Range Rover Sport – 22 horas y 17 minutos
Antoine Griezmann (FRA, Atl. Madrid): Maserati GranTurismo – 1 hora y 4 minutos

Otra de las conclusiones de la investigación indica que el valor del pase de todos los jugadores en cuestión supera el precio de sus respectivos automotores, con excepción de John Terry, “cuyo Ferrari 275 GTB vale más que el doble de su cotización”, aclaró Expansion.com.