Terminado el encuentro, varios jugadores de Huracán abordaron al juez central para protestarle las decisiones que afectaron el resultado final, como el penal que significó la apertura del marcador y la expulsión de Federico Mancinelli por una simulación de Marlos Moreno.

Hubo puños, empujones, insultos y hasta patadas entre algunos futbolistas de ambos equipos, por lo que la Policía, el personal de logística y hasta el técnico argentino Eduardo Domínguez tuvieron que intervenir.

Mientras Matías Fritzler decía que “es una vergüenza” la actuación del referí en la transmisión argentina de Fox Sports, que a su vez le daba la razón al conjunto visitante, los jugadores de Nacional Sebastián Pérez y Alexander Mejía se quejaban en la emisión colombiana del mismo canal de que los jugadores del equipo argentino “son malos perdedores”.

Por su parte, el goleador Ramón Ábila mostró su rabia al afirmar: “Nos roban en Argentina, nos roban en la Conmebol, nos roban en todo lado”, y pidió que la Confederación Suramericana no le permita dirigir más a Argote.

Marcos Díaz, guardameta de Huracán, denunció que el árbitro lo insultó tildándolo de “cagón” cada vez que intentaba decirle algo y añadió que “si nos ganaban bien nos íbamos tranquilos porque dejamos todo. Pero penal, expulsión y que te digan cagón en la cara no puede ser”, en palabras que recogió TyC Sports.

La pelea entre los jugadores del equipo argentino siguió hasta la zona mixta. Dice Cancha Llena que esta se produjo, además de la labor arbitral, por supuestas mofas de algunos agentes de seguridad y el personal de logística.

Hasta la cuenta oficial en Twitter del ‘globo’ promovió el uso del hashtag #UnRobo para denunciar lo ocurrido en el Atanasio Girardot.

“Que el escándalo del final no tape el corazón de estos jugadores”, dice el diario Olé para elogiar a los futbolistas de Huracán, de quienes dicen que entienden su reacción al concluir el partido, sin llegar a justificar la violencia.

Dicha publicación afirma de igual manera que “los colombianos han hecho méritos como para pasar a cuartos. Son fuertes, prolijos, juegan bien y, no es casualidad, se clasificó como el mejor primero”.

 

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