El ente señaló en comunicado emitido este lunes, que el operador designado para distribuir la boletería para el último partido de la Selección Colombia en Barranquilla, a disputarse el próximo 5 de octubre, “debe disponer 30.713 boletas para la venta en público general”.

Así mismo, se tendrán que hacer una o varias sesiones de venta “única y exclusivamente” a través de la página web que habilitada para dicho fin, y solo se permitirá la compra de máximo 4 boletas por persona. Si la Federación Colombiana de Fútbol desea hacer ventas corporativas, deberá contar con autorización de la Superintendencia, indicó esta.

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De igual forma, la SIC obliga a Colfútbol y al nuevo operador de boletería a disponer de mecanismos tecnológicos para que el Laboratorio Forense de la Superintendencia para que “pueda acceder y supervisar en tiempo real la venta de boletería”; también debe designar una empresa de auditoría externa que supervise la entrega y venta de las entradas para el juego.

Por último, máximo 5 días hábiles después de realizado el partido, la Federación tendrá que presentar un informe final de la operación de venta, avalado por el auditor externo.

De esta manera se pretenden contrarrestar las irregularidades presentadas durante el proceso de venta de boletería de todos los pasados encuentros de la eliminatoria, sobre los cuales según la SIC hubo una presunta “conducta sistemática encaminada al desvío masivo y deliberado de decenas de miles de boletas con fines de reventa”.

El escándalo estalló tras el anterior partido en que la Tricolor enfrentó a Brasil, juego tras el que varios hinchas denunciaron reventa de boletas por más del millón de pesos, y otros que incluso con boleta en mano, no pudieron entrar al estadio.

Colfútbol había advertido la semana anterior que para el partido Colombia vs. Paraguay hay sitios de internet ofreciendo boletería, cuando no se ha designado aún el operador de venta y distribución.

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