El ‘pantalonudo’, como se le conoce a este directivo que hace 50 años trajo el ‘micro’ a Colombia, hizo en El Espectador una defensa del mismo frente al llamado fútsal que hoy día está bajo el poder de la multinacional del fútbol mundial:

Es el deporte colectivo que más glorias le ha dado al país. Hemos ganado cinco mundiales, tres de mayores, uno femenino y uno sub-17. En Colombia se juegan al año más de tres mil torneos de microfútbol, avalados por las 28 ligas que tenemos, además de los campeonatos profesionales”

Cabe recordar entonces la división entre la Fifa, que maneja el fútsal, y el fútbol de salón o microfútbol, que cobija la AMF. En el caso de la Selección Colombia, la que quedó eliminada en octavos de final del Mundial que termina este fin de semana no es la misma liderada por Jhon Jairo Pinilla y que se ha coronado 3 veces a nivel orbital.

Aduciendo fidelidad a su Federación, las figuras de ese añorado equipo se negaron a aceptar supuestos ofrecimientos económicos por parte de la Federación Colombiana de Fútbol para vestir la camiseta del equipo de fútbol sala Fifa.

Jaime Arroyabe señala que de todas formas sí les han quitado jugadores a largo de estos años como Angellot Caro. “Comenzó en Saeta, un club nuestro, de los más representativos”, dice el directivo.

Para este hombre, Colombia hizo una presentación mediocre en el Mundial donde fue local y asegura el certamen fue un rotundo fracaso.

El público no asistió a los escenarios, no hubo difusión, y se perdió una gran inversión del Estado y de la empresa privada para darle gusto a FIFA”

Arroyabe está convencido de que su microfútbol es tan bueno que la multinacional del fútbol no ha podido acabarlo y con todo el dinero a su haber, no logró llevar público a los coliseos colombianos.

“Ellos tienen plata, nosotros pasión… El micro es el que se juega en todos los parques, en las calles, es el deporte que más se practica en el país. Y seguirá fuerte porque quienes lo manejan tienen interés en que siga vigente”, afirma.

En cambio, el directivo piensa que a Fedefútbol (hablando del caso colombiano) poco le importa el fútsal, al igual que el balompié femenino y el fútbol playa.

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