El partido empezó con un homenaje al exseleccionador español, Luis Aragonés, en el tercer aniversario de su muerte, aunque los ‘rojiblancos’ no pudieron honrar con una victoria al que fuera una de sus leyendas.

El Atlético de Madrid salió con ganas buscando presionar arriba, pero se mostraba impreciso en sus combinaciones con muchas pérdidas de balón frente a un Barça, que parecía tener más claro su juego.

Preciso en un contragolpe, Luis Suárez abrió el marcador para el equipo azulgrana (que jugó de aguamarina) tras una gran galopada, apenas a los 6 minutos de juego:

Si el uruguayo necesita poco para crear un gol, Lionel Messi necesita menos. Sólo una pelota al borde del área que perfiló y enganchó ‘La Pulga’ con la izquierda, potente, junto al poste, inalcanzable para el portero, fue suficiente para poner el 0 a 2 en la pizarra:

Superado por el ‘shock’ de los dos goles, y revitalizado con la entrada de Fernando Torres, apareció el Atlético. Lo hizo empeñado en que ni el encuentro ni la eliminatoria estaban terminados.

El 1-2 llegó en una jugada de estrategia. Gabi Fernández puso la pelota en el área, la prolongó Godín desde un costado y la remachó a gol, desde el otro, también de cabeza, Griezmann, desaparecido 45 minutos y omnipresente después:

En los últimos minutos, el Atlético asedió la portería azulgrana pero sin lograr empatar el encuentro, pese a que sobre la bocina con la puerta vacía Gameiro cruzó demasiado su tiro.

La semifinal se decidirá la próxima semana en el Camp Nou, donde Barcelona saldrá al campo con una ventaja importante.

Con información de AFP y EFE.

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