Esta mujer, naciada en Adelaida, lleva 11 participaciones seguidas en Paralímpicos, competencias en las que ha ganado nueve medallas de oro, tres de plata y un bronce, registra ABC de Australia.

La deportista sufre de paraplejia. En principio creía que era por tener la malformación congénita conocida espina bífida, pero a los 50 años descubrió que la enfermedad que la aqueja es producto de complicaciones en el parto.

Sin embargo, su discapacidad, ni ahora su edad, le han impedido ser una atleta consagrada. A lo largo de su carrera deportiva ha practicado, además de natación y tiro, pentatlón, esgrima y carreras en silla de ruedas.

“Mucha gente no puede creer que una mujer de 70 pueda aún competir en los Olímpicos o los Paralímpicos. Pero el tiro con rifle es un deporte donde si aún estás habilitado para apretar el arma sin ningún temblor y también puedes ver bien, tú todavía puedes disparar de muy buena forma”, asegura la australiana, registra The Irish Times.

Aunque la atleta pensó en retirarse, claramente no lo hizo, y ahora estudia la posibilidad de estar a Tokio 2020, al que asistiría con 78 años.

El esposo de Kosmala también es deportista paralímpico e incluso han competido el uno contra el otro en los Juegos de Sydney 2000. En esa ocasión la australiana ganó en tiro con rifle por un punto.

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