Así fue como el programa ‘Se dice de mí’ abrió la vieja herida que todavía busca una explicación clara de la razón por la que estando en McLaren, una de las escuderías que le peleaban a Ferrari su hegemonía en la Fórmula 1, el bogotano no terminó de correr la temporada del año 2006.

El espacio de Caracol Televisión recordó cuando el país quedó “atónito” por el anuncio de que Montoya dejaría la máxima categoría del automovilismo para ir a la Nascar.

“Me aburrí y no volvería nunca”, dijo Juan Pablo, a quien poco le gusta hablar del tema; sin embargo, añadió que lo que le cansó fue:

La politiquería, eso es mucho más político de lo que la gente cree”

Su amigo Felipe Triana elogia que Montoya hubiera “tenido los pantalones” para tomar la decisión, y trató de explicarla a partir de lo poco que ha podido hablar con el piloto bogotano al respecto:

Él descubre ahí, de alguna manera, los intereses que se mueven oscuros dentro de la Fórmula 1, con los que él no va. Lo único que él quiere es montarse a un carro, enfrentarse con 20 tipos y que gane el mejor”

En ‘Se dice de mí’, el periodista Germán Mejía Pinto afirmó que Montoya se encontró con un respaldo mayoritario a Kimi Raikkonen y para el comunicador “esas circunstancias fueron las que nos privaron”.

Su esposa Connie Freydell evocó lo complicado que fue ese momento porque se trataba del sustento de la familia y cómo su esposo no la hizo partícipe. “Si me quieres opinar bienvenida, pero la decisión la voy a tomar  yo”, le dijo.

Montoya añadió al respecto, ya que por entonces tenía entre 32 y 33 años y consideraba que por mucho podría firmar un contrato más en la ‘gran carpa’ debido a su edad:

Yo dije, me queda un último contrato y si no la estoy pasando bueno y si no hay un carro para ganar carreras o el campeonato, ¿para qué hacerlo? Sufrir no valía la pena”

Lo que se anunció oficialmente para que Juan Pablo no compitiera en el Gran Premio de Baréin fue que se lesionó jugando tenis; sin embargo, Mejía recordó cuando en una visita a la fábrica de motores de Mercedes le entregaron al colombiano un trofeo hecho con piezas de motor donde aparecía un muñeco sobre una moto levantada en una rueda y que en la mano sostenía una raqueta de tenis.

“La versión a él le gustaba mucho el enduro y que seguramente en una correría de esas se había caído, pero la prensa nunca encontró evidencia de eso”, dijo el periodista especializado en automovilismo.

Germán Mejía opina que el mundo no entendió la llegada de Montoya a Nascar, ya que allí le garantizaban el mismo nivel de ingresos que tenía en Fórmula 1; Connie Freydell agregó que se trataba de un reto nuevo, ya que el piloto nunca había estado en un equipo que no era de punta.

Juan Pablo afirma que la gente no veía Nascar, donde considera que empezó bien, pero cambiaron todo su ‘staff’ y “el equipo se fue a la nada. “La gente paró de poner atención, entonces era buenísimo porque uno venía acá (a Colombia) y nadie me miraba”, recordó.

El tema de su actitud con los medios también fue tocado en ‘Se dice de mí’. Sus allegados explican que pocos entendieron que él era una persona diferente y que tendrían que vivir una relación muy cercana con él para conocerlo como ser humano.

Montoya, por su parte, da su versión al respecto:

La gente en Colombia siempre se siente apoderada de la persona y que la persona les debe a ellos, y yo no soy así… Yo no soy un político, no vivo de sonreírle y darle la mano a todo el mundo”

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