Sin embargo, no aceptó que el planteamiento técnico ante los ‘ticos’ fuera una especulación, porque debía dar prioridad al equipo alterno con miras a las eliminatorias a Rusia 2018, pero sin faltar el respeto al rival.

Acá nosotros vimos que este era un buen momento para crecer (…) no es fácil, en plena eliminatoria, construir un nuevo equipo y teníamos que darle prioridad y, aún con el dolor de la derrota, vamos a crecer”, sostuvo en rueda de prensa.

Aseguró que no fue un error alinear un equipo con 10 jugadores suplentes, sino que, en algunos sectores, el experimento no funcionó.

Teníamos una idea inicial y yo lo dije sin faltarle el respeto a Costa Rica (…) pero aún así nosotros vimos la posibilidad de hacer un buen partido y de competir y de plantear esos objetivos, los que ustedes (los periodistas) llaman laboratorio”, destacó el técnico.

Para contener la andanada de críticas, tanto de periodistas como aficionados, Pékerman aseguró que los rivales en esta Copa América Centenario están muy parejos y por eso se están dando resultados “ilógicos”.

“Estamos viendo unos partidos muy cerrados en donde a los favoritos les cuesta mucho ganar y cuando ganan, ganan con alguna duda”.

Pero sobre todo, el entrenador destacó que a Colombia le costó mucho revertir el marcador, porque la prueba superó la experiencia de todo el equipo.

Colombia siempre fue desde atrás, una situación complicada, incluso para los experimentados, y cuando estábamos planteando la idea de juego,  Costa Rica se fue en ventaja. No nos acomodamos tan rápido como pensábamos y el trabajo de Costa Rica trajo complicaciones”, subrayó el entrenador de la Selección Colombia.

El único cambio que estuvo por fuera del planteamiento inicial, según explicó Pékerman, fue el de Juan Guillermo Cuadrado por un marcador central, “porque íbamos por unas variantes”. La inclusión de James y Cardona estaban aprobados sin importar el resultado del partido.

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